En la actualidad hay más de mil millones de personas con más de 60 años en el mundo, es decir el 13,5% de la sociedad tiene más de 60 años. Para 2030 se espera que estas cifras lleguen al 56% y se dupliquen para 2050.
Este escenario ha hecho que la OMS declaró la década del envejecimiento saludable 2020-2030.
A través de esta declaración los estados miembros de la OMS se comprometen a trabajar para mejorar la vida de las personas adultas mayores. Cumpliendo así además con los objetivos planteados en la Agenda 2030.
Si quieres saber más sobre el envejecimiento saludable y cómo contribuir a alcanzar una mejorar calidad de vida para las personas adultas mayores ¡sigue leyendo!
¿Qué es el envejecimiento saludable?
Antes de continuar, vamos a ponernos en situación y a entender en qué consiste el envejecimiento saludable.
El envejecimiento saludable no se entiende como una situación puntual, sino como un proceso en el que se fomenta la optimización y mantenimiento de la capacidad funcional con el objetivo de conseguir el bienestar en la vejez.
Es decir, el envejecimiento saludable busca que independientemente de la edad la persona pueda seguir haciendo todo aquello que le guste y quiera. Teniendo en cuenta, por supuesto, que cada persona envejece de una manera diferente.
Para alcanzar este estado de bienestar son muchos los factores que hay que tener en cuenta y deben de trabajarse. Entre ellos podemos encontrar una alimentación saludable, la realización de ejercicio físico y mental, formar parte de actividades en las que la persona disfrute, sentirse parte de la sociedad de forma activa.
Las 4 áreas de acción de la década del envejecimiento saludable
La década del envejecimiento saludable consiste en 10 años de colaboración en el que las personas adultas mayores se sitúan en el centro de todas las acciones.
Para lograrlo se ha divido en 4 áreas de trabajo:
1. Derribar los mitos y prejuicios hacia la edad y el envejecimiento
Aunque las personas adultas mayores sean una parte fundamental de nuestra sociedad gracias a las acciones y contribuciones que han hecho, todavía son muchos los estereotipos y prejuicios que rodean a la vejez.
Cobrando mayor importancia el garantizar independencia y autonomía en esta parte de la vida. Esto, además, va unido al derecho de estar informado en materias de salud, evitando de esta forma infantilizarles. Y, por supuesto, accesibilidad y movilidad personal acompañado de seguridad social y otros muchos derechos humanos fundamentales.
2. Asegurar que la sociedad fomente las capacidades de las personas mayores
Los espacios en los que se mueve la población son determinantes para disfrutar del envejecimiento saludable, siendo una poderosa influencia por las oportunidades que pueda ofrecer. De hecho, los entornos amigables con la edad son los mejores destinos para vivir, trabajar, estudiar, envejecer, es decir, una sociedad amigable con la edad es el mejor espacio para cualquier edad.
Llegando así a crearse La Red Mundial de la OMS para las Ciudades y Comunidades Amigables con las Personas Mayores
Así estas sociedades deben de:
- Prestar servicios a los más vulnerables
- Fomentar la comunicación entre entornos urbanos y rurales en los que intercambiar información, experiencias y aprendizajes para sus líderes
- Herramientas de medición para evaluar el trabajo que se está desarrollando para fomentar el envejecimiento saludable
- Crear entornos físicos y sociales amigables con el envejecimiento
3. Ofrecer atención integrada centrada en la persona y servicios de salud primaria que respondan a las personas adultas mayores
Los sistemas de salud deben de ser capaces de ofrecer atención sanitaria de calidad consiguiendo así que las personas adultas mayores se integren en el sistema. Para ello, los servicios deben de estar basados en la accesibilidad y sostenibilidad a largo plazo.
En este sentido, tanto el personal como el sistema deben de estar orientados a las personas adultas mayores integrándose en el sistema consiguiendo así una mejor atención.
Y lo más importante, este sistema debe de tener una visión de prevención, impulsando proyectos de mantenimiento y prevención de enfermedades, siendo esto fundamental para lograr un envejecimiento saludable.
4. Dotar de acceso a la atención socio- sanitaria a largo plazo para las personas adultas mayores que la necesiten
El deterioro de las capacidades físicas y mentales deriva en la limitación de las capacidades de las personas adultas mayores para ser autosuficientes. Resultando imprescindible el poder acceder a estos cuidados de forma digna.
Siendo en este apartado muy importante el papel de los cuidadores, quiénes también para poder brindar una atención adecuada, también tienen que cuidar de su propia salud.
Actividades para fomentar un envejecimiento activo, feliz y saludable
Son innumerables las actividades que se pueden desarrollar en la vejez, tantas como personas adultas mayores ya que estas actividades deben de ser acorde a sus gustos y necesidades. Pero, en definitiva, esta se pueden englobar en 4 grandes grupos.
Actividades cognitivas
El objetivo de estas actividades es que las personas adultas mayores continúen en conexión con la actualidad que les rodea. Para ello se trabaja principalmente la memoria, reflexionando sobre temas presentes, pasados y futuros.
Consiguiendo que el usuario esté orientado en las tres esferas espacio-tiempo-persona. En estas actividades se trabaja la memoria, capacidad de atención y concentración, cálculo y lenguaje, resolución de problemas y expresión.
Pero la forma en la que estas actividades se desarrollen también es de vital importancia, puesto que si las propias actividades que fomentan el envejecimiento activo y saludable no se basan en los gustos y necesidades de los usuarios se conseguirán los efectos contrarios como apatía o rechazo.
Para ello se recomienda realizar actividades como la estimulación cognitiva a través de gafas de realidad virtual. En estas sesiones el 100% de nuestros usuario le gustaría repetir al tratarse de una actividad realmente estimulante para ellos.
Además, gracias a un estudio científico hemos conseguido demostrar la evidencia de esta actividad como freno y mejora en el deterioro de las áreas cognitivas.
Sentirse útiles en la sociedad
Toda persona forma una parte imprescindible de la sociedad, independientemente de su edad. Por ello, sentirse ocupados y reafirmar ese sentimiento de identidad son necesarios para toda persona.
Las personas adultas mayores cuentan con un gran bagaje de vivencias y conocimientos que pueden poner al servicio de la sociedad unidas a sus pasiones o aficiones.
En estas actividades se busca trabajar la motivación, empatía, coordinación, expresión, creatividad… Y para ello entre algunas de las actividades que podemos encontrar es la música, pintura, jardinería, fotografía…
Ejercicio físico
La realización de actividades físicas es de vital importancia para preservar las capacidades tanto físicas como mentales. Pero siempre teniendo en cuenta tanto la intensidad como recurrencia de este ejercicio en función de las necesidades de la persona adulta mayor.
Al igual que en área anteriores, son muchas las actividades físicas como el yoga, pilates, baile, paseos, gimnasia… entre las que las personas adultas mayores pueden elegir, siendo lo más importante su gusto por esta actividad, para así poder disfrutarla y que se convierta en una de sus rutinas.
Ocio
Todas las actividades descritas anteriormente deben de contemplarse como actividades motivantes y estimulantes, pero también es importante contar con actividades estrictas de ocio.
En ellas se fomenta la compañía y socialización en un ambiente distendido. Aquí podemos encontrar actividades como el cine, teatro, clubs de lectura, quedadas por gustos…
Pero para poder conseguir que esta década del envejecimiento saludable se convierta en una realidad, es necesario invertir en recursos a largo plazo. Así se conseguirá una esperanza de vida más larga, pero también de mayor calidad.
Las personas adultas mayores que disfrutan de un envejecimiento saludable consiguen volver a impactar de forma positiva en la sociedad, transmitiendo ese bienestar tanto a la familia como a la suciedad, rompiendo mitos y prejuicios.
Desde Vivirtual somos fieles defensores del envejecimiento activo y saludable y por ello trabajamos en su desarrollo a través de actividades de estimulación cognitiva a través de gafas de realidad virtual. Gracias a ellas los usuarios trabajan la memoria y se encuentran vinculados con la sociedad y la última tecnología.
Para comprobar su eficacia los profesionales que trabajan con ellos pueden medir la evolución en una plataforma propia, lo que demuestra la efectividad de nuestra metodología.
Si quieres saber más, ¡no dudes en ponerte en contacto con nosotros! Estaremos encantados de ayudarte y guiarte hacía el envejecimiento activo y saludable.
